La psicoterapia contemplativa es una disciplina que comprende el asesoramiento profesional, combinando los puntos fuertes de la psicología occidental tradicional con la práctica de la conciencia contemplativa basada en la compasión. El psicoterapeuta contemplativo, posee formación en psicología, psiquiatría o psicoterapia, una formación integral y experiencia como terapeuta, una formación Master en Psicoterapia Contemplativa de Nalanda, y mantiene la practica de meditación personal.
Nuestro enfoque enfatiza el valor de trabajar para la transformación de la mente a través de las practicas de meditación- en todas las tradiciones- y la compasión como un elemento fundamental y necesario para el cultivo de la propia cordura.
La psicoterapia contemplativa tiene una orientación neurocientifica, teórica y empiricamente validada, bien sostenida, no promoviendo el sectarismo, una técnica particular, o visión del mundo. Sino promoviendo y enfatizando una alianza cliente terapeuta respetuosa y genuina, que se basa en la compasión, la apertura y la clara confianza a través de todos los aspectos de la experiencia.
Considerando que todos los conflictos, crisis, necesidades y clarificaciones son oportunidades de transformación; donde el enfoque en el proceso terapéutico ayuda a los clientes a explorar las posibilidades de tanto cambio como de aceptación. El terapeuta puede ayudar a los clientes a desarrollar habilidades en áreas tales como la búsqueda de la propia voz, los bloqueos que impiden la construcción de la confianza, la comunicación efectiva, el conflicto como una “evolución”, el déficit de compasión, la comprensión de los sistemas de la familia / grupo, el conocimiento del cuerpo-mente, la intimidad, la atención, la conciencia de los roles habituales y los patrones de comportamiento, o el proceso de duelo. En la psicoterapia contemplativa la compasión y la bondad básica, en lugar de se patológica , se enfatiza.
La psicoterapia contemplativa, posee un enfoque basado en las fortalezas que ayuda a las personas a identificar y a explorar el sentido innato del ” no saber sabiendo”, ayudando a identificar y a explorar el interior de aquello que se sabe significativo, e importante. Desde el punto de vista contemplativo, el proceso de la terapia ayuda a aumentar la comprensión de los obstáculos internos, iluminando los externos, favoreciendo aquellas soluciones que son importantes para el paciente.
La depresión, la angustia, la confusión, el miedo, en esta terapia no son elementos a evitar, sino una buena signo de crecimiento, un signo saludable que el propio sujeto genera. Indicando la necesidad de atención, cuidado, empatía y cambio
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